La gobernadora de Oregón, Tina Kotek, promulgó el proyecto de ley estatal sobre el derecho a reparar, e incluso incluye una disposición que potencialmente lo hace más sólido que las versiones de California y Minnesota. Es el primero en prohibir (PDF) una práctica llamada «emparejamiento de piezas», que requiere el uso de ciertos componentes propietarios para su reparación. El emparejamiento de piezas evita que los servicios de reparación de terceros reemplacen un componente roto por uno que no proviene de la propia marca, porque no funcionaría con el software de la empresa. Las personas suelen recibir mensajes de error si intentan instalar una pieza no autorizada, lo que les obliga a comprarla a la propia empresa.
Según las nuevas reglas, está prohibido impedir que un proveedor independiente instale piezas que no sean de marca. Al igual que reducir el rendimiento de un dispositivo que había sido reparado con un componente no autorizado. Incluso esos mensajes de error y advertencias no están permitidos. Sin embargo, la prohibición del emparejamiento de piezas no cubre los dispositivos que ya están disponibles y solo se aplicará a cualquier dispositivo fabricado después del 1 de enero de 2025.
Si bien los fabricantes como Apple parecen haber cambiado de opinión en los últimos años y ahora apoyan en general el movimiento por el derecho a reparar, la disposición de emparejamiento de piezas de Oregón seguía siendo un punto de discordia. El alto directivo de Apple, John Perry, dijo a los legisladores en un testimonio que su empresa «está de acuerdo con la gran mayoría del Proyecto de Ley del Senado 1596». Sin embargo, también le preocupan las implicaciones de seguridad de permitir el uso de piezas no autorizadas, como sensores biométricos, para su reemplazo.
De todos modos, la prohibición del emparejamiento de piezas es ahora una regla según la ley de Oregón, además de poner piezas compatibles a disposición de los propietarios de dispositivos a través de la empresa o proveedores de servicios autorizados a precios favorables y sin condiciones «sustanciales». Las empresas también deben poner a disposición de los talleres de reparación documentación sobre cómo reparar sus dispositivos, así como cualquier herramienta especial necesaria para repararlos. Estas reglas se aplicarán a todos los teléfonos vendidos después del 1 de julio de 2021 y a otros dispositivos electrónicos de consumo vendidos después del 1 de julio de 2015.