En Malasia, el ex primer ministro Najib Razak detenido


El ex primer ministro de Malasia, Najib Razak, vio confirmada su sentencia a doce años de prisión en apelación el martes 23 de agosto por corrupción en uno de los aspectos del caso 1Malaysia Development Berhad (1MDB). Este nombre es el del fondo soberano de Malasia que puso en marcha en 2009 y del que se malversaron durante su reinado (2009-2018) el equivalente a 4.500 millones de dólares (3.800 millones de euros en ese momento) según la justicia estadounidense, la primero en tomar el caso en 2016, luego de sospechas de lavado de dinero con sumas colosales.

Según los informes, el Sr. Razak fue llevado a la prisión de Kajang, ubicada al sur de la capital, Kuala Lumpur. Es la primera vez que un primer ministro de Malasia cumple condena en prisión, y el primer encarcelamiento en Malasia en relación con el caso 1MDB. Su condena de doce años de prisión y multa de 210 millones de ringgits (47 millones de euros), impuesta en 2020, sanciona actos de abuso de confianza y poder así como blanqueo de capitales por haber cobrado ilegalmente el equivalente a diez millones de dólares de SRC International , una antigua unidad de 1MDB.

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En el momento de su primera acusación, en septiembre de 2018, su partido, la Organización Nacional de Unidad Malaya (UMNO), acababa de ser derrotado en las elecciones de mayo, una primicia histórica para este partido, que dominaba la vida política desde la independencia en 1957. Los allanamientos en las residencias del ex primer ministro y su esposa, Rosmah Mansor, revelaron una vertiginosa acumulación de joyas, bolsos y objetos preciosos, valorados en 273 millones de dólares.

La policía había llenado cinco camiones con dinero en efectivo por valor de 28,6 millones de dólares y se había llevado 457 bolsos, entre ellos el equivalente a 12 millones de euros de la marca Hermès. También se habían invertido cientos de millones de dólares en edificios en Manhattan, una película de Hollywood y pinturas maestras a través de un intermediario, el financiero chino-malasio Jho Low, presunto autor intelectual del desvío a gran escala del fondo soberano. Todavía buscado por los tribunales de Malasia, reside en Macao, bajo protección china.

“Defensa intrínsecamente inconsistente”

A través de este escándalo, Malasia también puso a prueba cierta forma de gobierno. Pero la UMNO volvió al poder en agosto de 2021, sin acudir siquiera a las urnas, tras el hundimiento de la coalición que la había derrocado. Y Najib Razak, que seguía siendo popular entre parte de la clase media de Malasia por su pedigrí -es hijo del segundo primer ministro de Malasia, Abdul Razak- y cierto carisma, estaba en medio de un regreso político. Fue él, junto al presidente de la UMNO, Ahmad Zahid Hamidi, actualmente juzgado por corrupción en otro juicio, quien movió los hilos del partido. Claramente estaba maniobrando para volver a ser Primer Ministro en caso de victoria en las próximas elecciones legislativas, previstas para el otoño.

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