A lo largo de la Historia, la relación que el ser humano tiene con los animales ha evolucionado significativamente: el animal ha sido a su vez objeto de investigación, herramienta, fuente de trabajo pero también compañero. Para explorar los vínculos históricos que unen al hombre y al animal, Virginie Girod recibe a Éric Baratay, historiador especializado en la historia de las relaciones entre humanos y animales.
Desde la domesticación de la cohorte de nuestros animales domésticos, hace unos 10.000 años, nuestras relaciones con los animales han seguido profundizándose y diversificándose. «Al principio, los domesticábamos para obtener leche y carne. Luego, poco a poco, los pusimos a trabajar, ya fuera ganado para tirar de los carros o caballos que utilizábamos no sólo en la granja, sino también para la guerra», dice Éric Baratay.
En cuanto a los animales domésticos, el historiador encuentra rastros de ellos ya en el antiguo Egipto. Utilizado por primera vez contra los roedores para proteger los cultivos, el gato se convirtió posteriormente en el compañero del hombre. En Roma, son más bien perros y pájaros los que reciben el cariño de los humanos. «Existía la práctica de enterrar a estos animales favoritos. En las tumbas, los textos nos permitían ver lo que la gente pensaba de sus animales y observamos sentimientos muy cercanos a los que conocemos hoy», subraya Éric Baratay.
La expansión del cristianismo trastocó las prácticas existentes. «En la Biblia hay versículos que son muy desfavorables para los perros. En consecuencia, veremos desaparecer el modelo del perro de compañía, parece escandaloso», explica Éric Baratay. En el siglo XVII se produjo una nueva ruptura en el mundo intelectual: el animal pasó a ser considerado una máquina. “Descartes es el teórico”, explica Éric Baratay. Si se piensa también el cuerpo humano como una máquina, “la diferencia se hace a nivel del razonamiento y de la emoción”. Se forman entonces dos escuelas de pensamiento: por un lado, establecemos la noción de máquina-animal, que conduce a la industrialización de los animales, por ejemplo en la cría y el sacrificio. Por otro lado, insistimos en la sensibilidad animal. «Una pequeña minoría se rebeló contra el sufrimiento de los animales, y así se creó en 1845 la SPA, que en aquella época se ocupaba principalmente de los caballos. En 1850, fue la primera ley para la protección de los animales», desarrolla Éric Baratay. Los avances científicos, que han demostrado la existencia de emociones y sufrimiento en los animales, han completado la legitimación del debate sobre la condición animal.
Temas tratados: mascotas, Antigua Roma, Antiguo Egipto, Descartes
“En el corazón de la historia” es un podcast de Europe 1 Studio
– Presentación: Virginie Girod
– Producción: Camille Bichler y Nathan Laporte
– Director: Pierre Cazalot
– Composición de la música original: Julien Tharaud
– Redacción y distribución: Nathan Laporte
– Comunicación: Marie Corpet
– Visual: Sidonie Mangin