Por cierto, el zoo australiano dedica todo un programa a este día tan especial. Alimentación de cocodrilos por parte de la familia Irwin en el Crocoseum, encuentro con las mascotas Bluey y Bingo, cupcakes de cumpleaños, entrada gratuita para menores de 14 años, ¡todo en honor a Grace!
Por supuesto, tampoco podían faltar los regalos. Robert Irwin, el tío de los pequeños, la vio «tamborear» en un xilófono de juguete que le regalaron a la hija de Bindi. Aparentemente funcionó bastante bien, al menos eso es lo que pensó la orgullosa familia.
Puedes sentirlo, el amor de los padres felices. En otra publicación, la mamá de Grace escribe feliz: “Felicidades, mi agraciada guerrera (…). Es el mayor honor ser tu mamá. Te amo por siempre, incondicional e infinitamente”. La imagen adjunta muestra al dúo madre-hija íntimamente unidas. Grace felizmente levanta los brazos mientras Bindi sostiene sus diminutas manos.