El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, anunció el lunes 30 de mayo que presentaría “legislación para hacer cumplir un congelamiento nacional de la posesión de armas de fuego”tras los recientes asesinatos en el vecino Estados Unidos.
“Esto significa que ya no será posible comprar, vender, transferir o importar armas de fuego en ningún lugar de Canadá”, dijo, durante una conferencia de prensa brindada en compañía de varias decenas de familiares de víctimas de la violencia armada. Este proyecto debe ser presentado al Parlamento, donde el Partido Liberal de Trudeau es minoritario.
Canadá ya había prohibido 1.500 modelos de armas de fuego de estilo militar tras un asesinato en abril de 2020, el peor en la historia del país, que dejó 23 muertos en Nueva Escocia (este).
Muchas armas importadas de los Estados Unidos.
Según las estadísticas oficiales, las armas de fuego están involucradas en solo el 3% de los delitos violentos en Canadá. Pero el ministro de Seguridad Pública, Marco Mendicino, estima que en el país circulan alrededor de un millón de armas cortas, muchas de ellas importadas ilegalmente de Estados Unidos.
“La violencia armada es un problema complejo”dijo el Sr. Trudeau. “Pero al final del día, las matemáticas en realidad son bastante simples: cuantas menos armas haya en nuestras comunidades, más seguros estarán todos”agregó.
Este anuncio se da luego de la masacre en la escuela de Uvalde, Texas, en la que 19 niños de 9 a 11 años y dos docentes fueron asesinados a balazos por un adolescente que compró legalmente un rifle de asalto.
Oposición apunta a bandas criminales
La propuesta de Trudeau fue criticada por la oposición conservadora. “El verdadero problema en este país no son los dueños de armas respetuosos de la ley, quienes están estrictamente regulados y controlados”dijo John Brassard, líder de la oposición en la Cámara de los Comunes, a Radio-Canada. “El verdadero problema de este país son las bandas y delincuentes que importan armas, principalmente de Estados Unidos, y que usan armas ilegales en nuestras calles”agregó.
«El anuncio de hoy no se centra en la raíz de la violencia armada en nuestras ciudades: las armas de fuego ilegales introducidas de contrabando en Canadá por bandas criminales».tuiteó, en la misma línea, la diputada conservadora Raquel Dancho.
El proyecto de ley canadiense también planea evitar que cualquier persona involucrada en violencia doméstica obtenga una licencia de armas y endurecer las penas por tráfico de armas. También se prohibirán los cargadores de rifle que puedan contener más de cinco balas.
La Coalición para el Control de Armas, fundada tras el asesinato de catorce mujeres en una universidad de Montreal en 1989, aplaudió el proyecto. “La eliminación gradual propuesta de la posesión privada de armas de fuego es un gran paso adelante y demuestra que el gobierno ha escuchado las voces de las víctimas”dijo en un comunicado la presidenta de la organización, Wendy Cukier.