París tiene que renovar otro hito: la rueda de molino del teatro Moulin Rouge cayó a la acera el jueves por la noche.
“Lin Rouge” en lugar de “Moulin Rouge”: la rueda del molino y partes de las letras del teatro de París se cayeron el jueves por la noche.
(dpa) La rueda del molino del teatro de variedades Moulin Rouge de París cayó desde el tejado a la acera sin que nadie resultara herido. La causa del incidente del jueves por la noche aún no está del todo clara, según declaró esta mañana el prefecto de policía de París, Laurent Nuñez, a la emisora TF1. La zona fue acordonada y peritos investigaban la seguridad del edificio. Las imágenes mostraban que la rueda del molino dañada yacía entera frente al teatro de cabaret. También fueron arrancadas tres letras del gran cartel del Moulin Rouge.
La rueda del molino cayó entre las dos y las tres de la madrugada, cuando el teatro ya estaba cerrado, informó la emisora BFMTV. No hay riesgo de derrumbe para el resto del edificio. Según el Moulin Rouge, la tecnología de la rueda del molino se controlaba semanalmente, pero no se encontraron anomalías. Fue la primera emergencia en el Moulin Rouge desde un incendio en 1915, tras el cual el cabaret estuvo cerrado durante nueve años, informó la emisora.
El cabaret más antiguo de París es un imán turístico
El Moulin Rouge, que celebra su 135 aniversario en octubre, es el cabaret más antiguo de París y uno de los símbolos de la ciudad. La casa todavía brilla en un rojo pecaminoso, aunque los días en que simbolizaba el frívolo París ya pasaron. El público del templo del espectáculo de Montmartre también ha cambiado. El espíritu bohemio de antaño ha dado paso a turistas de todo el mundo, y las bailarinas semidesnudas ya no sólo atraen a manadas de hombres. El Moulin Rouge es una de las atracciones más visitadas de París.
Los expertos inspeccionan la rueda de molino dañada.
El cabaret ya no sirve al cliché de la frivolidad y la decadencia. El teatro de revista más antiguo de la ciudad se ha convertido en un viaje al pasado que comienza en el vestíbulo con el papel pintado de terciopelo rojo. Un toque de Belle Époque que también llega al visitante en la sala de espectáculos con capacidad para 850 personas: lámparas y espejos Art Nouveau y columnas publicitarias con fotografías de Toulouse Lautrec.